El Volkswagen Escarabajo: un producto con influencia nazi
La historia del legendario Volkswagen Escarabajo, para aquellos que aún no la conocen, resulta sorprendente por dos detalles importantes: su desarrollo inspiró los primeros pasos de Porsche y, además, fue encargado por Hitler.
En las primeras tres décadas del siglo XX, el ingeniero alemán Ferdinand Porsche se encontraba trabajando en el desarrollo de un automóvil deportivo con refrigeración por aire y prestaciones en pleno desarrollo.
Los primeros prototipos dieron lugar al modelo VW Tipo 1, en respuesta a la solicitud del gobierno alemán de un automóvil para el pueblo que fuera práctico y económico.
En la década del 30, Hitler ordenó que se finalizara el desarrollo del modelo, ya que las circunstancias económicas requerían de un motor simple e indestructible. De hecho, los Escarabajos llegaron a formar parte de la flota del régimen nazi.
Mientras que los Land Rover ingleses tenían problemas de sobrecalentamiento en su sistema de refrigeración, el sistema de enfriamiento por aire del Escarabajo, similar al de las motocicletas más básicas, evitaba ese inconveniente.
Mientras que el Land Rover necesitaba agua para su radiador, los alemanes la usaban para beber, ya que el Escarabajo nunca la necesitó.
Su producción en masa comenzó en plena Segunda Guerra Mundial, y hacia finales de la década de 1940 ya había más de 10.000 vehículos circulando.
La popularidad del vehículo llevó a su exportación a varios países europeos, y la marca alemana estableció fábricas en Estados Unidos, México y Brasil.
Después de producir 21 millones de unidades del Escarabajo en todas sus fábricas, la última unidad se fabricó en México en el año 2003.
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Usos actuales del Escarabajo
Aunque originalmente se diseñó para ser un vehículo familiar, los primeros kilómetros los compartió con los alemanes durante los 6 años de duración de la guerra.
Su internacionalización no fue bien recibida, especialmente en Estados Unidos, donde históricamente preferían motores V8 de alta potencia y rendimiento. Sin embargo, esto cambió en la década de los años 60.
En esa época, el Escarabajo, junto con la Combi (que utiliza el mismo motor pero de mayor cilindrada), se convirtieron en el símbolo de un movimiento contrario al consumo excesivo de los estadounidenses.
Desde entonces hasta ahora, el Volkswagen Escarabajo se ha democratizado. Puedes verlo, o haberlo visto, siendo utilizado para diversos fines. Lo mismo ocurre con la Combi.
Además de ser utilizado por los hippies para viajes y música rock, también fue el primer automóvil para muchas familias jóvenes, y donde más de uno aprendió a conducir.
En México, se pueden ver circulando por las calles como taxis y en Chile, los más adornados, han sido lujosas limusinas utilizadas para eventos y bodas.
A pesar de las estrategias de electromovilidad y las nuevas normas sobre emisiones, cada vez más estrictas, el icónico Escarabajo se niega a abandonar el panorama automotriz.
De hecho, parece que estas noticias no le afectan, ya que el Fusca, como se le conoce en Brasil, sigue siendo más relevante que nunca.
La simplicidad de su mecánica fue clave para su éxito
El motor original, en su mayoría con capacidades de 1.3 o 1.6 litros, era un motor de pistones horizontales opuestos, conocido como motor bóxer, que le da al Escarabajo ese sonido característico…algunos dirían que parecido a un ronroneo de gato.
Este tipo de motor, con algunas tecnologías adicionales, también es utilizado en Porsche y Subaru. Sin embargo, la principal innovación en el caso del Escarabajo es que, al igual que muchas motocicletas, no requiere de un radiador con líquido refrigerante, bomba de agua o termostato. Como dicen los puristas, «el agua es para las plantas».
El Escarabajo no cuenta con ningún accesorio electrónico más allá de los sistemas de encendido electrónico. No tiene desempañador de vidrios, aire acondicionado, panel LED o control de estabilidad. Es un automóvil básico, con un medidor de kilometraje, indicador de combustible, motor, ruedas, caja de cambios y eso es todo.
Al no utilizar agua para refrigeración, no hay riesgo de que una manguera se rompa debido al calor o al desgaste, lo que causaría una fuga en el radiador y posiblemente daños al motor.
En cambio, el Escarabajo, al no utilizar agua, cuenta con un sistema de enfriamiento por aire, con la ayuda de un radiador de aceite.
Detrás del motor, se encuentra una especie de campana o compartimento donde hay una turbina que gira a la misma velocidad que el motor. Esta turbina transporta aire que ayuda a enfriar el motor.
Por otro lado, el sistema de enfriamiento del lubricante del radiador de aceite ubicado detrás de la turbina, garantiza que el motor funcione siempre a la temperatura óptima.
Si el Escarabajo está equipado con estos componentes en buen estado y el motor está correctamente ajustado y mantenido, no debería experimentar problemas de sobrecalentamiento. En caso de que ocurra, se manifestará mediante una pérdida de potencia del motor, lo que te obligará a detenerte por un tiempo para disfrutar del paisaje.
Si llegas a tener un problema de sobrecalentamiento, generalmente no ocurrirá en la ciudad, sino en carretera después de haber recorrido varios kilómetros. Si la turbina y su radiador de aceite funcionan bien, junto con un buen mantenimiento del motor, ese Escarabajo será prácticamente indestructible.
Los manuales recomiendan cambiar los 2.5 litros de lubricante cada 3,000 kilómetros. Esto se debe a que el aceite, al formar parte del sistema de enfriamiento, tiende a perder viscosidad y desgastarse más rápidamente.
Escarabajo para aventuras todoterreno
El Escarabajo ha sido utilizado para muchos propósitos, pero pocos conocen una inclinación particular e imaginan que puede enfrentar terrenos donde un hatchback o citycar normal no puede llegar.
Si se reduce ligeramente la presión de los neumáticos en verano, el Escarabajo puede adentrarse en zonas de arena o incluso escalar montañas. No deberías tener mayores problemas mientras vayas a la velocidad adecuada y sigas el ritmo del paisaje.
La tracción trasera y el motor posterior contribuyen a la eficiencia de los poco más de 30 HP que tiene el automóvil. El peso en la parte trasera ayuda a aprovechar mejor la potencia y el torque. Algunos incluso los modifican para adaptarlos mejor a la conducción todoterreno, agregando ruedas grandes estilo jeep.
Si alguna vez has visitado Brasil de vacaciones, es posible que hayas visto buggys e incluso hayas dado un paseo en uno de ellos. Pues bien, esos buggys tienen exactamente el mismo motor que las Combis y Escarabajos, pero debido a su carrocería de fibra de vidrio, son mucho más ligeros, lo que incrementa su potencia.
El New Beetle no es un verdadero escarabajo
El día en que se anunció que el Escarabajo seguía existiendo, y presentaron el New Beetle, hubo una mentira. Este nuevo vehículo no fue más que una forma de aprovecharse del prestigio, la nostalgia y la simplicidad del Escarabajo, lanzando un automóvil con terminaciones redondas.
A diferencia del Escarabajo, el New Beetle no utiliza enfriamiento por aire, su motor y tracción se encuentran en la parte delantera, y no es un automóvil simple ni económico. Además, ya no provoca sonrisas en las personas cuando lo ven pasar por la calle.
Eventos y viajes en el Escarabajo
Como se puede apreciar, el Volkswagen Escarabajo es más que un automóvil, es un ícono cultural. Hace 20 años, en Santiago, surgió el Club Beetlefriends Chile.
Este club de fanáticos comenzó siendo reuniones alrededor de una parrilla donde intercambiaban anécdotas y conocimientos mecánicos. Hoy en día, han crecido y se han convertido en una comunidad presente en todo el país.
De hecho, comunidades de Escarabajo en toda Latinoamérica organizan, cada 22 de junio, un encuentro para conmemorar el Día Mundial del Escarabajo. Esta fecha marca el inicio de la producción de este clásico en 1934 bajo la dirección de Ferdinand Porsche.
Los miembros de Beetlefriends Chile coinciden en que, más allá de su mecánica y funcionamiento, el encanto del Escarabajo radica en las sonrisas que genera en aquellos que ven pasar uno por la carretera.
