¿Cuál es la diferencia entre baja, media y alta tensión en electricidad?
La diferencia entre baja, media y alta tensión en electricidad radica en el voltaje con el que la electricidad se transfiere de un cuerpo a otro. Esto se mide en voltios y representa la diferencia de potencial eléctrico entre dos puntos.
La tensión eléctrica
La tensión eléctrica, también conocida como diferencia de potencial, es una magnitud física que cuantifica la diferencia de potencial eléctrico entre dos puntos. Es el voltaje con el que la electricidad pasa de un cuerpo a otro y se mide en voltios.
Si dos puntos con diferencia de potencial se conectan mediante un conductor, se produce un flujo de electrones. El punto de mayor potencial cede parte de su carga al punto de menor potencial a través del conductor hasta que ambos igualen su potencial eléctrico. Este traslado de cargas se conoce como corriente eléctrica.
Baja tensión
La baja tensión se refiere a un voltaje más bajo, generalmente utilizado en instalaciones domésticas y comerciales. Este voltaje suele ser de 220/230 voltios en Europa y 110/120 voltios en América del Norte. La baja tensión se utiliza para la alimentación de electrodomésticos, iluminación y equipos de bajo consumo.
Media tensión
La media tensión es un voltaje intermedio que se utiliza en instalaciones industriales, sistemas de distribución de energía y áreas residenciales de alta densidad. Este voltaje varía según el país y puede oscilar entre 1 kilovoltio (kV) y 36 kilovoltios (kV). La media tensión se utiliza para la alimentación de maquinaria industrial y sistemas de transporte como trenes y tranvías.
Alta tensión
La alta tensión se refiere a un voltaje aún mayor utilizado en sistemas de transmisión de energía a larga distancia, interconexiones eléctricas entre países y grandes industrias. Este voltaje puede ser mayor a 36 kilovoltios (kV) y alcanzar hasta varios cientos de kilovoltios (kV). La alta tensión se utiliza para la transmisión eficiente de grandes cantidades de energía a través de redes eléctricas de alta capacidad.
En resumen, la diferencia entre baja, media y alta tensión reside en el voltaje utilizado en la transferencia de electricidad y las aplicaciones para las que se utilizan. La baja tensión se emplea en instalaciones residenciales y comerciales, la media tensión en industrias y sistemas de distribución, y la alta tensión en sistemas de transmisión de energía a larga distancia y grandes industrias.
Alta tensión: para transportar electricidad
Las instalaciones de alta tensión (AT) son aquellas que superan los 36 kV de voltaje. Este tipo de tensión se utiliza principalmente para el transporte de electricidad a grandes distancias.
Para poder transportar la electricidad a largas distancias, es necesario elevar la tensión y así reducir la intensidad que circula por la línea. Esto ayuda a prevenir las pérdidas de energía debido al calentamiento de los cables conductores y a los fenómenos electromagnéticos. La red de transporte de electricidad es un ejemplo de instalación de alta tensión.
- Primera Categoría: la tensión nominal es superior a 66 kV e inferior a 220 kV, o las tensiones normalizadas son 110 kV, 132 kV y 150 kV.
- Segunda Categoría: la tensión nominal es superior a 30 kV e igual o inferior a 66 kV, o las tensiones normalizadas son 45 kV y 66 kV.
- Tercera Categoría: también conocida como «media tensión», se refiere a tensiones superiores a 1.000 V de valor nominal.
De acuerdo con la normativa, se considera una instalación de alta tensión eléctrica a aquellas que generan, transportan, transforman, distribuyen o utilizan energías eléctricas con tensiones superiores a 1.000 V de valor nominal.
Media tensión: para distribuir la electricidad
Una vez la electricidad ha sido transportada desde el lugar de generación hasta el punto de consumo, pasa por una subestación eléctrica donde se transforma de alta tensión a media tensión (MT). Las instalaciones de media tensión tienen un voltaje que oscila entre 1 y 36 kV, aunque en Cataluña el voltaje más comúnmente utilizado es de 25 kV.
Las líneas de media tensión pueden ser aéreas o subterráneas y deben cumplir con requisitos específicos de seguridad. En España, las líneas de media tensión se encuentran en la misma categoría que las líneas de alta tensión, ya que no existe una normativa particular para este tipo de instalaciones eléctricas. La generación y distribución de energía eléctrica, así como grandes consumidores como hospitales, aeropuertos o industrias, utilizan la media tensión.
Baja tensión: para consumir la electricidad
La baja tensión es utilizada por la mayoría de los aparatos eléctricos y se considera menos peligrosa que la alta tensión o la media tensión. Sin embargo, es importante tomar precauciones para evitar accidentes. Las instalaciones de baja tensión deben estar protegidas con interruptores y diferenciales en la entrada de las viviendas para garantizar la seguridad.
Es obligatorio que las instalaciones de baja tensión sean realizadas y manipuladas por profesionales autorizados. Además, la puesta en marcha de una instalación de baja tensión requiere un trámite de legalización. La baja tensión se utiliza en pequeños consumidores como viviendas o alumbrado público.
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¿Por qué es importante conocer la diferencia?
Es vital entender la diferencia entre baja, media y alta tensión para garantizar una correcta instalación y utilización de los sistemas eléctricos. Cada nivel de tensión tiene características y requisitos específicos que deben ser cumplidos para evitar accidentes y garantizar la eficiencia energética.
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