¿Cuál es la gasolina de «menor octanaje»?
Para explicar la conveniencia del uso de gasolina de menor octanaje es necesario comprender el significado de esta denominación.
El octanaje, o número de octanos, es una medida de la calidad y capacidad antidetonante del carburante en las máquinas de combustión interna, con el objetivo de evitar detonaciones y explosiones, y así obtener la máxima cantidad de energía útil para el funcionamiento del automóvil.
En resumen, el octanaje representa la capacidad de la gasolina para comprimirse antes de la combustión.
En Chile, se comercializan tres clases de gasolina clasificadas según su octanaje:
- 93 octanos: la categoría más baja o menos refinada.
- 95 octanos: esta variedad de bencina sin plomo tiene altos estándares de calidad y brinda mayor potencia al motor.
- 97 octanos: es la gasolina más refinada y, aunque más cara, es recomendable utilizarla si el manual de tu automóvil especifica su uso.
Al usar una gasolina con un bajo número de octanos, se pueden experimentar detonaciones o explosiones dentro del motor, mal funcionamiento y menor rendimiento del combustible mientras el vehículo está en movimiento.
Esto provoca un ruido fuerte o golpeteo conocido como cascabeleo, el cual también genera gases contaminantes adicionales.
¿Qué tipo de combustible es adecuado para tu vehículo?
Si deseas conocer el tipo de carburante requerido por tu automóvil, es necesario consultar el manual del propietario, el cual detalla todas las especificaciones del motor y las recomendaciones del fabricante.
En caso de que tu vehículo necesite gasolina de menor octanaje, puedes optar por utilizar combustible con mayor cantidad de octanos sin poner en riesgo el motor. Sin embargo, se desaconseja realizar lo contrario, ya que esta práctica puede generar desgaste y daños prematuros al motor.
¿Son efectivos los aditivos?
En la mayoría de las estaciones de servicio, es posible encontrar productos que prometen aumentar el octanaje de la gasolina para prevenir el cascabeleo y limpiar los inyectores.
No obstante, es importante tener precaución: los aditivos pueden eliminar el cascabeleo y limpiar, pero no aumentan la cantidad de octanos contenidos en el combustible.
En realidad, lo que hacen es retardar la ignición de la chispa. Uno de los inconvenientes de estos productos es que, con el tiempo, pueden resultar perjudiciales y causar daños en el motor, ya que se convierten en una especie de sustancia pegajosa que se adhiere a las paredes internas, potencialmente provocando daños irreparables.
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Recomendaciones
Para mantener tu vehículo en óptimas condiciones, ahorrar combustible y evitar el cascabeleo, es fundamental utilizar el tipo de gasolina recomendado por el fabricante.
Para optimizar el consumo de combustible de tu vehículo, te recomendamos seguir estos sencillos consejos:
- Planifica tu viaje y elige las rutas más eficientes.
- Asegúrate de que la presión de los neumáticos sea la adecuada según las especificaciones del fabricante.
- Mantén tu vehículo ligero, ya que el exceso de peso resultará en un mayor consumo de combustible.
- Utiliza el cambio de velocidades correctamente, iniciando en primera solo para arrancar y cambiando a velocidades superiores a medida que avanzas.
- Conduce con las ventanillas cerradas, ya que el aire que ingresa a la cabina genera una resistencia adicional que requiere más esfuerzo del vehículo.
Además, es importante consultar a un mecánico de confianza y expertos antes de utilizar un nuevo producto en tu automóvil, incluso si ha sido recomendado por familiares o amigos.
Recuerda que cada vehículo es diferente y es mejor consultar para evitar daños graves. Utilizar el tipo equivocado de combustible puede tener consecuencias costosas, así que es importante seguir las instrucciones del fabricante.
