La Tasa Interna de Retorno (TIR) es una medida utilizada para evaluar la viabilidad de un proyecto o empresa, comparando su rentabilidad con otras opciones de inversión de menor riesgo.
La TIR se expresa como un porcentaje y se calcula considerando los flujos de cobros y pagos actualizados generados por la inversión. Esta medida permite determinar si un proyecto es conveniente o no, en comparación con alternativas más seguras y cómodas.
Es importante destacar que la TIR transforma la rentabilidad del proyecto en una tasa de rentabilidad comparable a las inversiones de bajo riesgo. Si la rentabilidad del proyecto es menor que estas alternativas, no sería conveniente invertir.
El cálculo de la TIR es fundamental a la hora de tomar decisiones de inversión en un mundo variable, donde los mercados se ven afectados por cambios políticos, sociales y económicos difíciles de anticipar. La TIR proporciona parámetros que nos permiten evaluar el valor y el riesgo de una inversión, ayudándonos a mitigar la incertidumbre del mercado actual.
Para calcular la TIR, se deben considerar los flujos de efectivo generados por el proyecto a lo largo de su vida útil y aplicar técnicas de valoración financiera adecuadas.
Para comprender mejor el cálculo de la TIR (Tasa Interna de Retorno), es necesario tener conocimiento de la fórmula del VAN (Valor Actual Neto), que calcula los flujos de caja descontando la tasa de interés que podría haberse obtenido, menos la inversión inicial.
Al descontar la tasa de interés que podría haberse obtenido de una inversión menos arriesgada, cualquier beneficio mayor a cero será a favor de la empresa en comparación con la inversión menos arriesgada. Así, si el VAN es mayor a 0, vale la pena invertir en el proyecto, ya que se obtiene un beneficio mayor.
Fórmula de la TIR (VAN igualado a 0)
Veamos los componentes de la fórmula de la TIR y su representación:
- F representa los flujos de caja en cada periodo.
- I0 es el valor del desembolso inicial de la inversión.
- n es el número de periodos considerado.
Por lo tanto, el resultado de esta ecuación se expresa como un porcentaje, que luego se compara con el porcentaje de interés considerado más seguro. Como su nombre indica, la TIR muestra un valor de rendimiento interno de la empresa en forma de porcentaje, y se puede comparar con una tasa de interés.
Tasa Interna de Retorno (TIR): Análisis de rentabilidad
Para realizar el análisis de viabilidad de la empresa, la tasa de rendimiento interno debe compararse con una «tasa mínima de corte», que representa el costo de oportunidad de la inversión. Estos dos porcentajes se pueden comparar directamente, y el mayor representará una mayor rentabilidad.
De esta manera, se puede realizar una comparación simple entre ambos porcentajes y, según esta comparación, determinar si el proyecto debe llevarse a cabo o no. El análisis de la TIR es el siguiente, donde r es el costo de oportunidad:
- Si TIR > r, entonces se rechazará el proyecto.
- Si TIR < r, entonces se aprobará el proyecto.
Ejemplo de Rendimiento Interno de Inversión (RII)
Para comprender mejor el cálculo del RII, pongámoslo en práctica con un ejemplo numérico:
Supongamos que una persona desea emprender un negocio y necesita invertir inicialmente 10,000 USD. Calcula que tendrá ingresos anuales de:
- 4,000 USD durante el primer año.
- 5,000 USD durante el segundo año.
- 7,000 USD durante el tercer año.
Estos valores se pueden registrar en una tabla de Excel para calcular fácilmente el RII utilizando la fórmula financiera adecuada. Simplemente seleccionamos los valores de la tabla en la sección «Valores» de la fórmula del RII y obtendremos su valor:
Representación gráfica del RII
El Rendimiento Interno de Inversión, como mencionamos anteriormente, es el punto en el cual el Valor Actual Neto es cero.
En este caso, si representamos en un gráfico el VAN de una inversión en el eje de las ordenadas y una tasa de descuento o rentabilidad en el eje de las abscisas, la inversión se mostrará como una curva descendente. Ahora bien, el RII es el punto en el que esa inversión cruza el eje de las abscisas, donde el VAN es igual a cero. A continuación se muestra una representación del RII.
Si se desea comparar el Rendimiento Interno de Inversión de dos inversiones, se puede apreciar la diferencia entre el cálculo del VAN y el RII (el punto en el que se cruzan se conoce como intersección de Fisher):
¿Cuándo es apropiado utilizar el RII?
Supongamos que tienes la oportunidad de invertir en una empresa nueva y tu banco te ofrece un producto financiero seguro con un interés del 5%. En esta situación, decides calcular la TIR de la empresa nueva y obtienes un resultado del 8,7%. Es conveniente invertir en la empresa, ya que la rentabilidad será mayor.
En otro escenario, un emprendedor te presenta un plan de negocio que estima una rentabilidad positiva en 5 años. Antes de aceptar el proyecto, debes calcular la TIR y considerar tu tasa mínima de corte, que es el rendimiento mínimo requerido para invertir en el proyecto.
Selección de proyectos basada en la tasa interna de retorno
Al elegir el siguiente proyecto, donde «k» es la tasa de descuento de los flujos para calcular el VAN:
- Si la TIR > k: Se acepta el proyecto de inversión, ya que la tasa interna de retorno obtenida es mayor que el rendimiento mínimo requerido.
- Si la TIR = k: Esta situación es similar a cuando el VAN es igual a cero. En este caso, la inversión se realizará si mejora la posición competitiva de la empresa y no hay otras alternativas mejores.
- Si la TIR < k: Se rechaza el proyecto, ya que no alcanza el rendimiento mínimo necesario para la inversión.
Desventajas de la tasa interna de retorno
A pesar de la facilidad para evaluar proyectos de inversión y reflejar su rentabilidad, existen ciertas dificultades y desventajas:
Hipótesis de reinversión de flujos de efectivo intermedios: Supone que los flujos netos de efectivo positivos se reinvierten a una tasa «r» y los flujos netos de efectivo negativos se financian a una tasa «r».
Inconsistencia de la TIR: No garantiza asignar una rentabilidad a cada proyecto de inversión, lo cual puede llevar a soluciones matemáticas sin sentido económico, como proyectos con varias tasas de retorno reales y positivas o proyectos sin tasas de retorno con sentido económico.
Recomendaciones sobre la Tasa Interna de Retorno (TIR)
Es fundamental tener en cuenta que la TIR se basa en proyecciones de rendimiento futuro, las cuales pueden variar con el tiempo. La viabilidad de un proyecto está sujeta a diversos factores, como el costo de los insumos, cambios tecnológicos, gestión interna y otros aspectos.
Otro desafío surge cuando los flujos de efectivo de una empresa varían entre períodos con números negativos y positivos, lo que afecta la precisión de la fórmula de la TIR. En estos casos, es recomendable utilizar una fórmula ajustada de la TIR.
No es aconsejable evaluar un proyecto exclusivamente en base a la TIR, ya que existen otros factores igualmente importantes, como el análisis fundamental, el riesgo del proyecto, el análisis costo-beneficio y las situaciones específicas de contexto.
Conclusiones sobre la Tasa Interna de Retorno (TIR)
En resumen, la TIR es una herramienta crucial para tomar decisiones sobre la viabilidad de un nuevo proyecto, ya que permite comparar diferentes opciones de rentabilidad y determinar si el proyecto es factible. Sin embargo, es esencial considerarla como parte de un conjunto de métodos de evaluación de proyectos, para evitar pasar por alto otros aspectos que generen valor al proyecto.
Al proporcionar un valor cuantitativo que puede ser comparado con otras opciones de rentabilidad, la TIR es una herramienta valiosa en momentos como este, en los que los cambios en el mercado nos obligan a revisar nuestras inversiones de forma constante.
Por último, es importante resumir lo mencionado anteriormente sobre la Tasa Interna de Retorno:
- La TIR permite determinar la viabilidad de una inversión y jerarquizar entre varios proyectos.
- Es preferible elegir la inversión con una TIR más alta entre las opciones viables.
- La TIR presenta dificultades en su cálculo y puede ser inconsistente debido a las suposiciones sobre reinversión de los flujos de efectivo netos.
- Las inversiones ejecutables son aquellas con una TIR superior a la rentabilidad exigida (que puede calcularse de diferentes formas).
- El método gráfico utiliza un rango de valores para la tasa de retorno requerida (R) y calcula el Valor Actual Neto (VAN) de los flujos de efectivo para cada valor dado de R. El punto en el que el VAN=0 también es el lugar donde TIR=R.
- En Excel, la fórmula para calcular la TIR se llama «tir». Simplemente se deben ingresar los flujos de efectivo en celdas consecutivas y en otra celda aparte se debe ingresar el rango completo para obtener el resultado de la TIR.